Ser tu amiga es una mierda. Lo fue hace algunos años y lo es de nuevo. Fui tu confidente por días y horas, y dejé que las hormigas cafés me picaran las nalgas y las piernas, sentada junto a ti en suelos recelosos sólo por no dejar de escucharte. ¿Ya olvidaste quién iba a buscarte? Quién accedía a ser tu oído cuando necesitaste a alguien. Muy mala consejera, muy mal ejemplo pero siempre dispuesta a leerte. Te olvidaste de algunos amigos antes de cinco centímetros de fama; nos odiaste por equivocarnos pero tu también te equivocas y lo sabes.
Creo que pocos han creído en ti como yo lo hice. A veces en mi narcisismo creo que nadie. Quizá mi error fue mandarte al carajo.
Y ¿Qué es amistad? ¿Para ti significa algo? Llevo meses sin tomarlo personal, pero te sigo importunando. No sé si aún me consideras tu amiga, pero seguro ya no me necesitas. Por mi parte siempre estaré aquí porque el alejarme de ti me ayudó a comprender mejor quién soy y quién eres. No voy a olvidarte.
Te escribo porque me canso, te reprocho porque a veces me dueles. Pero aún sé quién eres, compañero, y nunca te negaré mi mano.
Al "Merodeador Nocturno"
Me llamo Soltera y soy una ironía
He dejado ruinas a mi paso sin salir ilesa
He habitado tantos corazones que perdí mi espacio
Me he alojado en tantas mentes que ya no sé dormir
Tantos ojos han devorado mi aura que me volví transparente
Lo sé, no es normal estar sola cuando siempre hay alguien evocándote
Aún hay alguien que no se atreve a decir mi nombre
Voy a ser recordada pero nunca inmortal
Voy a seguir escribiendo las cosas menos leídas
y buscando los sueños más marginados de todas las utopías
Voy, algún día, a cantar para el viento
a alzar la voz frente a una multitud de tiempo
Expondré mi alma desnuda frente a la ausencia
voy a obtener a cambio una ovación de silencio
Siempre habrá un ingenuo recordándome
Quizás un corazón iluso idealizándome
Mas mi lealtad ha sido ultrajada
Ha sido encerrada en las venas de Cronos
Siempre habrá una lujuria deseándome
Acaso un disparo de hormonas buscándome
Mas yo santifiqué el sexo hace tiempo
Lo bordé sobre amor a carne y sangre
Ya no hay corazones para mí
Caí en donde buscaba
y la imposibilidad me golpeó en la cara
Quise ver hermosas sonrisas
pero siempre he sabido cuál es mi sitio, mi vida
Estoy cayendo en resignación
Algún día dejaré de escribir sobre mí
